Todo proyecto tiene una fase inicial, una fase de desarrollo, y una fase final. Aquello de presentación, nudo y desenlace de los libros, las películas, y en verdad de cualquier buena historia o proyecto que se precie.
Todo ha ido muy deprisa desde que presenté el disco. Es la vida que he escogido, es la que quiero. Resta decir que me gustaría que las cosas fueran más sencillas, pero no lo son, y punto. Uno sabe lo que tiene, y si además sabe lo que quiere, ya no necesita nada más que ponerse a andar. Para conocerse hay que asumirse; aceptar las limitaciones, resaltar las cualidades, sin que todo ello esté intrínsecamente ligado a competir con los demás, ni siquiera a compararse con los demás. Disfruto llevando mis canciones de un lado para otro. Quiero hacer mejores canciones, lo que significa que cada día que pase sea capaz de expresar con mayor simplicidad y concreción aquello que pienso o siento. Nunca dejas de aprender a tocar un instrumento,... queda mucho por tocar, y me apetece...mucho.
Hay veces que tienes vibraciones, una sensación, algo que te hace reflexionar. Puede que un acontecimiento desencadene los cambios, o puede que no. En ocasiones los cambios se producen poco a poco. Me atrevería a afirmar que suele ser así, lo que sucede es que no reparamos en ellos. Es similar a los cambios que experimenta una persona que tenemos siempre a nuestro lado, a la que vemos todos los días. Muchas veces no nos damos cuenta de que se producen hasta que un día, de pronto, caemos en la cuenta. Es más sencillo apreciarlos para alguien de fuera, que no está acostumbrado/a a vernos.
Me fascina esto. Me gusta, -con el tiempo-, pararme a pensar qué motivó que tomase ciertas decisiones que a posteriori resultaron fundamentales en mi vida. Un ejemplo puede ser el momento en el que decidí cerrar la tienda de regalo que tenía, y en la que aprendí mucho, y fui feliz durante algo más de dos años. Venía "cocinándose" esa idea de poner fin a una aventura empresarial, desde al menos medio año antes de que bajase por última vez aquella verja. Otras veces todo se precipita, aunque he de reconocer que soy bastante reflexivo e idealista y suelo tener muy claro cual es el siguiente paso a dar, de todos modos sin una pequeña dosis de impulsividad es imposible tomar según qué decisiones. Me fui a vivir a un piso compartido con otros jóvenes justo antes de empezar esta gira y de poner en marcha este proyecto, y la decisión se tomó en una mañana. Fue precipitado, pero ahora me siento feliz de la decisión que tomé.
He hecho 53 conciertos por todo el país en menos de cuatro meses. Los viajes en coche solo te dejan tiempo para pensar, para darle vueltas a las cosas. Si estás bien apuras, quieres llegar antes, quieres acercarte a tu destino y empezar a gestionar las actividades que has imaginado. Si estás mal te sientes especialmente solo. Puedes llegar a tener la sensación de que huyes, de que vas de un lado para otro pero sin que nadie te esté esperando, sin que nadie haya reclamado tu presencia. Te planteas si tiene sentido lo que estás haciendo, y lo que es más importante; por qué lo haces ¿Qué quieres demostrar?
En mi caso, después de pensarlo mucho, he llegado a ciertas conclusiones. Quiero compartir mi música con los demás, quiero "foguearme" sobre los escenarios, quiero sentir una y otra vez esa sensación de complicidad con quienes escuchan. Hay modos de conseguir las cosas mucho más directos y efectivistas, pero sin duda mucho menos satisfactorios. Lo importante no es llegar, creo de veras que lo verdaderamente importante es disfrutar y aprender por el camino. Ver el edificio hecho, es el culmen, genera en el arquitecto la sensación de triunfo, de haber completado su obra, pero cada uno de los pasos que da, cada vez que resuelve una dificultad, que salva un escollo, que logra revisar y mejorar alguna de sus decisiones, hace que sienta que está levantando algo donde no había nada, que de su imaginación y de su "fantasía" (si se me permite este romántico término) se ha logrado hacer algo tangible. Un día aparecen los resultados, y claro, estás contento, pero llegan fruto de mucho esfuerzo previo, de muchos pequeños éxitos anteriores, imperceptibles para la mayoría. Es muy complicado para alguien que consigue un premio sin haber puesto apenas energías en alcanzarlo, valorar la medida de lo conseguido porque simplemente no la tiene, no ha hecho nada y alguien le ha puesto ahi. Para quien no tiene nada y se esfuerza día tras día en ir un poco más allá, tiene un gran valor. Pienso en aquellas personas que sufren algún impedimento físico y sacan ilusión, garra y entrega suficientes como para intentar mejorar algo su situación y como poco a poco van experimentando pequeños-grandes avances. A eso me refiero.
Por ahora estoy contento con los resultados que estoy obteniendo con el proyecto "Y tú más!", o no, según se mire. Aprecio mucho lo que he conseguido, y tengo ganas de esforzarme por mejorarlo. En ello seguiremos. Espero concretar más actuaciones y conciertos para los próximos meses, y sacar adelante alguna de las campañas que tenemos ideadas, y de las que rendí debidas cuentas en un artículo anterior a este y que podéis leer. Por desgracia en la mayor parte de los casos la falta de financiación echa por tierra con todo lo planificado, pero es otro obstáculo que debemos aprender a salvar. Buscaré la forma de conseguirlo. Seguiré informando.
Un abrazo a todos/as!
Tenemos que hacerlo, aunque no nos dejen
Hace 1 día
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