Libro: "Crea tu propia suerte" de Peter M. Kash

Peter M. Kash
CREA TU PROPIA SUERTE

TÁCTICAS DE ÉXITO QUE NO LE ENSEÑARÁN
EN LAS ESCUELAS DE NEGOCIOS

Ediciones Pirámide
Grupo Anaya S.A.

Año 2009

Eres mucho más responsable de tu destino de lo que piensas.

“Aprendemos más del fracaso que del éxito. A menudo descubrimos qué es lo que funciona tras comprobar qué es lo que no funciona”.- Samuel Smiles.

Cada una de tus acciones es una causa que genera un efecto. Debes comprender a qué te estás comprometiendo antes de hacerlo y comprender por qué estás adquiriendo tal compromiso. A veces creemos que haciendo feliz a otra persona nos hacemos felices a nosotros mismos. Lamentablemente, ese modo de pensar puede volverse a menudo en contra nuestra.

Uno de los principios que cultivan los japoneses es el reconocimiento de que el éxito se consigue mediante la cooperación y el esfuerzo conjunto y no con el trabajo individual.

En ocasiones, tienes que relajarte y pensar en todo lo que te ha sido dado y todo lo que has conseguido. A veces todos tenemos que hacer una pausa y dar las gracias.

Nunca te midas en función de las valoraciones de tus detractores, pero escucha y aprende de sus críticas. Si queremos tener éxito, tenemos que conocer nuestros puntos débiles.

El fracaso será sólo una condición temporal, una oportunidad para aprender. De hecho, es sólo un paso en el camino hacia el éxito.

La mayoría de nosotros no confiamos en quienes se preocupan únicamente por el dinero. Tememos que cuando el vendedor lo consiga nos abandone. Nos preocupa que puedan estafarnos. Cuanto más superficial sea la relación con un vendedor, mayor será el temor a ser estafado. En la mayoría de los casos, quienes venden un mal producto, o estafan a otros, evitan las relaciones profundas y los compromisos personales.

Otra perspectiva importante, especialmente para un nuevo cliente, es intentar evitar hacer negocios en tu primera reunión o visita. Intenta evitar venderle algo en la primera visita.

Una de las mejores formas de demostrar la sinceridad es llamar a tus clientes inmediatamente cuando las cosas van mal. Quieren saber que te preocupas por ellos.

Puedes ser agradable, pero nada sustituye la competencia, el conocimiento, y la aptitud.

Cuando Chevrolet intentó comercializar su modelo Nova en España, el coche fracasó estrepitosamente. Sólo después de haber perdido millones se dieron cuanta de que Nova se parece mucho a la expresión española “no va”, es decir, “no funciona”.

Ronald McDonald fracasó rotundamente como símbolo de marketing en Japón porque la cara blanca significa la muerte para los japoneses.

Coca-Cola intentó vender Coke en botellas de 2 litros en España, sin darse cuenta hasta mucho después de que poca gente tenía neveras lo suficientemente grandes como para guardar botellas de 2 litros. Huelga decir que nadie las compraba.

En realidad, las negociaciones no empiezan hasta que oyes la palabra “no”. Estás hablando con alguien, que tiene autoridad y está en una posición para decir “sí”.

Cuando te enfrentas a una oportunidad o un reto importante, que no sabes si asumir o no, contesta a las siete preguntas siguientes:

1.- ¿Qué ofrece la oportunidad?
2.- ¿Qué tienes que perder si las cosas no salen bien?
3.- ¿Tienes otra elección?
4.- ¿Deseas dedicar tu tiempo, energía y coraje en este empeño?
5.- ¿Tienes la madurez, o sabiduría, para desenvolverte con habilidad en las situaciones?
6.- ¿La situación te ofrece la oportunidad de hacer algo que te divierte, e incluso que te apasiona?
7.- ¿Qué sientes por dentro?

Nadie puede juzgar lo cerca, o lejos, que nos hemos quedado de realizar nuestro sueño. Sólo nosotros mismos lo sabemos.

Hay una vieja historia que cuenta que el gran Picasso estaba una tarde en un café de París cuando se le acercó una turista americana y le pidió que le dibujara algo.

- Se lo agradecería sinceramente – dijo la mujer -, y por supuesto le pagaría.

Picasso aceptó el papel que la mujer le dio y empezó a pintar con esa concentración tan característica suya. Cuando acabó el dibujo se lo dio a la mujer.

- Oh, señor Picasso, es precioso. Es realmente precioso – le dijo la mujer-. ¿Cuánto le debo?
- Son 30.000 dólares, señora.
- ¿Treinta mil dólares? ¡Pero si sólo ha tardado un minuto!

A lo que Picasso replicó:

- Señora, usted no me paga por el minuto que he tardado en hacer el dibujo, sino por los treinta años que he tardado en aprender a hacer este dibujo en un sólo minuto.

Lo único que hay que hacer es dedicarse a estudiar con pasión y convicción un campo en particular, aplicar el conocimiento adquirido y desarrollar habilidades, asistir a clases, talleres y simposios profesionales, hablar con otros profesionales del campo, leer, actualizarse y volver a aplicar el conocimiento adquirido.

Tenemos que poner empeño en lo que hacemos, independientemente del trabajo de que se trate. Tenemos que aprender todo lo que podamos sobre nuestro campo, desarrollando al máximo nuestras capacidades y nuestro potencial; debemos intentar orientar nuestra carrera profesional hacia lo que realmente nos motiva.

Centrarse en un área específica de nuestra profesión y adquirir conocimiento y habilidades únicas es un paso esencial para lograr una carrera de éxito.

Diez cosas positivas que puedes hacer:

1.- Asistir a conferencias.
Para aprender y estar a la última en tu profesión. Escuchar a los líderes del sector. Conocer a gente y hacer contactos. Buscar la inspiración.

2.- Hacer un curso de oratoria.
Si aspiras a ser un líder en tu profesión, debes ser un buen orador.

3.- Leer, leer, leer.
La lectura abre las puertas a nuevas formas de pensar, a culturas y gentes diferentes y a nuevas oportunidades que el mundo nos ofrece.

4.- La importancia de la historia.
Hay estudios científicos que demuestran que la gente que escribe diarios resuelve asuntos emocionales con más soltura y tiene una mejor salud mental. Escribir un diario sirve para documentar hechos importantes y tendencias en nuestra vida, para explorar nuestros sentimientos, dejar fluir nuestras emociones, frustraciones y estrés y para tener una visión objetiva de la situación a la que nos enfrentamos.

Los que saben algo de historia tienen una visión mucho más amplia de la vida. Son personas más educadas y capaces. Destacan en discusiones públicas y es más probable que se les identifique como líderes. El periódico es una afirmación diaria de la historia mundial, de la de tu comunidad, tu provincia, tu país, y del mundo.

5.- Aprender un segundo idioma.

La próxima generación de líderes empresariales será sin duda bilingüe.

6.- Establecer objetivos y lograrlos.

7.- Ser proactivo, no reactivo.
Ser proactivo significa abordar un problema de forma directa, con visión y liderazgo. Afrontar los problemas antes de que se conviertan en crisis.

8.- Guardar las tarjetas de visita. Crear la tuya propia.

9.- Escoger un deporte, practicarlo con asiduidad y destacar en él.
Presión de plazos, largas horas de trabajo, retos constantes, autodisciplina y largos viajes son algunas de las exigencias que deberás afrontar. Todas esas exigencias crean una tensión física que sirve de caldo de cultivo para muchas enfermedades y adicciones. Generalmente liberamos esta tensión física utilizando la comida, el alcohol, las drogas y otras formas de comportamientos adictivos como vías de escape.

10.- Ser generoso.
Volverás la vista atrás y darás las gracias a todos los que te ayudaron a llegar donde estás.


Todos hemos tenido a alguien en nuestra vida que nos ha dado más de lo que nosotros nunca hubiéramos podido darle a cambio. El regalo de esa persona resultó esencial para nuestras vidas y nuestra felicidad. Sé ese alguien al que la gente mire y diga “él cambió mi vida, me dio algo que nunca olvidaré”.