[...esto es una continuación del anterior...]
[pueden encontrarlos todos en la etiqueta "personal" (columna derecha)]
El IMPA es un colectivo social que agrupa a una serie de jóvenes preocupados e interesados por el arte y la cultura y que organizan talleres, ciclos, cursos, y eventos relacionados con la cultura, en una vieja fábrica abandonada que data de 1914. Hasta allí llegué buscando lugares donde actuar y me abrieron las puertas de su vieja fábrica de aluminio. Un sitio precioso para rodar un videoclip o una película. Un lugar de lo más bohemio y peculiar para hacer un concierto. Un edificio inmenso que albergaba la fábrica encargada de un recordado modelo de avión militar argentino, además de balas, cañones y demás, y en la actualidad de bandejas de aluminio como las que vemos en los supermercados y en las tiendas de alimentos. Cuando en los años setenta-ochenta la empresa quebró, algunos de sus empleados se negaron a quedarse tirados en la calle de brazos cruzados y mientras veían como sus jefes se largaban ellos ocuparon la fábrica y se mantuvieron allí, invitando en la actualidad a este grupo de jóvenes a ayudarles en el cuidado del lugar favoreciendo así la creación de un espacio artístico donde sólo había ruinas. Aún permanecen las viejas máquinas. Entrar allí es toda una experiencia. Espero poder dar un concierto allí pronto.
Ya he ido a mi primera discoteca argentina, boliche como se diría acá. Una en tres meses, me recuerda a mí mismo que estoy para otra cosa, y que la gente con la que me llevo es mayor, y sí, está para otra cosa. He salido de noche algunas veces, pero es cierto que no había ido aún a perrear. Fui a la Sala Araoz. Música muy mala, casi toda latina, pero menos reggaeton del que me esperaba. Con todo, me han hablado de otras discotecas a las que tengo que ir sí o sí. Me dejaré caer ¿Por qué no?
Luego de tres meses conocí a unos españoles. Os prometo que debe haber sido una tremenda casualidad, porque se supone que aquí hay muchos españoles, pero no sé si será la zona en la que vivo (barrio residencial y algo pijo) o que justo se da la casualidad que ahora mismo en mi curso no hay españoles, o qué, pero sólo he estado un día con españoles. Los conocí en la puerta de un concierto. Dos gallegos; él de Tui, ella de Coruña. Están aquí por un periodo de un año, aunque podrían llegar a renovarles y extender su experiencia. Ambos habían vivido ya en el extranjero, y eso es algo que suele repetirse cuando conozco a alguien de otro país, y es que las personas que deciden emprender una vida en el extranjero suelen repetir la experiencia, algo que me motiva a animaros a todos/as aquellos/as que os lo estéis pensando a probar suerte en otros países. Ya escribí un artículo en este blog hace unos días en el que relataba la "fuga de cerebros" que se está dando en españa hacia otros lugares, y que precisamente muchos de mis amigos están ahora mismo viviendo en otros países. Voy a recomendaros el ICEX (Intituto de Comercio Exterior). Ellos forman parte de un grupo de muchos más españoles, que se reúnen por internet para hacer planes en la capital y para compartir sus cosas. Muchos trabajan como becarios para esta institució y es el mayor chollo que te puedas imaginar. Cobrando becas de aproximadamente 2.000€ al mes, vives como un millonario en este país, más teniendo en cuenta que no pagas una escuela, sino que cobras por estar "aprendiendo" en tu trabajo. Puedes pedir plaza para montones de lugares del mundo, es más, he recordado que un amigo mío, Joaquín Colunga, está con algo parecido en Qatar. Es una oportunidad única, así que echadle un vistazo los que podáis porque igual tenéis la ocasión. No he quedado más con esta gente porque llevan un carro de vida que no me puedo permitir, y porque no tengo apenas tiempo para sus planes. Yo estoy realmente ocupado, estudiando música y trabajando en la promoción de mi obra, tanto a nivel de internet como a nivel personal, y casi todas las personas con las que me llevo son argentinas o latinoamericanas, pero cuando tenga oportunidad seguramente trataré de anotarme a alguno de sus planes.
¡Qué cosas tiene la vida! Siguiendo el ejemplo de mi amigo Xermán Bugallo en estos momentos aún llevo en mi muñeca derecha, la pulsera de entrada al Festival Vigo Transforma, que se celebró en junio en nuestra ciudad, y que organiza Esmerarte, una empresa a la que le tengo especial aprecio, porque conozco a varias de las personas que la llevan, y porque ya tienen varios años de fajarse con unos y con otros promocionando la música de la ciudad y principalmente activando el panorama musical vigués con sus proyectos, así que decidí llevármela conmigo para recordar a mis compañeros de profesión en Vigo. Pues bien, este verano se pagaba cerca de 60€ por ver los tres días de festival, en los que entre otros, actuaba Xoel López, que hasta poco tiempo atrás era conocido como Deluxe, ya que llevaba una década con ese proyecto en solitario, y claro, como que llegó un día en el que decidió quitarse caretas y psudónimos y quedarse con el nombre que en su día le pusieron sus padres. Y ahí estaba yo, viéndole por vez primera, ya que nunca antes había coincidido con él, y su primera etapa, cantando en inglés no me gustaba. Tardé años en familiarizarme con su música, y no fue hasta sus últimos dos discos cuando empezaron a gustarme algunos temas. Pues bien, hace no mucho descubrí que estaba viviendo en Buenos Aires, que casi lleva tres años aquí, que vino con el "Laboratorio Ñ" junto a Iván Ferreiro, Quique González, Amaral, Pereza,... y se coló por la ciudad y por una morocha y se instaló en el barrio de Caballito a vivir, no sin antes recorrerse todo el continente, incluído el hemisferio norte del mismo, en una ruta que debe ser realmente apasionante.
Fui a su concierto por 3€. Si, tal cual, 3€. No diré que estaba en la primera fila, porque no había filas. Se trata de "Despacio Martínez", un salón cultural, que no deja de ser un salón de una casa, (precioso, por cierto), en el que cantaba mientras apenas 50-60 personas nos sentábamos en sofás, sillas y en el suelo, cenando o tomando algo, mientras escuchábamos al gallego. Le saludé, le tiramos alguna broma durante la actuación y le regalé mi disco. Tenemos un par de amigos en común; Eladio Santos, para mí el mejor autor de canciones vigués, que ahora por fin empieza a tener algo de reconocimiento, mucho movimiento y bastante promoción, merecida y ganada a pulso con los años; y Quique González, del que ya he dicho todo cuanto se puede decir, y al que espero ver en Argentina pronto, porque somos un buen grupo los que le echamos de menos. Luego he vuelto a otro concierto suyo. Aquí se mueve bastante pero está empezando, no sé cómo explicarlo, está dando conciertos en locales, poco a poco, intentando dar a conocer su obra, y tiene un mérito enorme, porque es cierto que podria estar en España donde ya tiene un reconocimiento y un público pero está aquí, ganándoselo de a uno. Sus conciertos son realmente buenos, con un sonido muy cuidado, y donde demuestra una técnica vocal muy perfeccionada, al igual que con la guitarra donde tiene mucha maestría, no sé cómo lo hacían antes, pero hoy por hoy, está a un gran nivel, otra cosa es que en nuestro país se prefiera el pop-rock, a la música más latina o la canción de autor, que es lo que está haciendo hoy por hoy. A mi me gusta mucho, claro. En el segundo concierto que me vio, ya me saludó y de nuevo le tiré un par de guiños que respondió con sorna. Un crack del que estoy aprendiendo algunas cosas.
Fui a su concierto por 3€. Si, tal cual, 3€. No diré que estaba en la primera fila, porque no había filas. Se trata de "Despacio Martínez", un salón cultural, que no deja de ser un salón de una casa, (precioso, por cierto), en el que cantaba mientras apenas 50-60 personas nos sentábamos en sofás, sillas y en el suelo, cenando o tomando algo, mientras escuchábamos al gallego. Le saludé, le tiramos alguna broma durante la actuación y le regalé mi disco. Tenemos un par de amigos en común; Eladio Santos, para mí el mejor autor de canciones vigués, que ahora por fin empieza a tener algo de reconocimiento, mucho movimiento y bastante promoción, merecida y ganada a pulso con los años; y Quique González, del que ya he dicho todo cuanto se puede decir, y al que espero ver en Argentina pronto, porque somos un buen grupo los que le echamos de menos. Luego he vuelto a otro concierto suyo. Aquí se mueve bastante pero está empezando, no sé cómo explicarlo, está dando conciertos en locales, poco a poco, intentando dar a conocer su obra, y tiene un mérito enorme, porque es cierto que podria estar en España donde ya tiene un reconocimiento y un público pero está aquí, ganándoselo de a uno. Sus conciertos son realmente buenos, con un sonido muy cuidado, y donde demuestra una técnica vocal muy perfeccionada, al igual que con la guitarra donde tiene mucha maestría, no sé cómo lo hacían antes, pero hoy por hoy, está a un gran nivel, otra cosa es que en nuestro país se prefiera el pop-rock, a la música más latina o la canción de autor, que es lo que está haciendo hoy por hoy. A mi me gusta mucho, claro. En el segundo concierto que me vio, ya me saludó y de nuevo le tiré un par de guiños que respondió con sorna. Un crack del que estoy aprendiendo algunas cosas.
Uno echa de menos tener cerca a alguien que le conozca de verdad. Ya saben, sentir que alguien "es de los tuyos", que no tienes nada que explicar, ni nada de que definir, que sabe de qué palo vas, de que pie cogeas, que sólo con verte saca ya conclusiones de cómo estás. Esa es quizás una de las cosas qué más echo en falta. Me gustaría traerme a los míos para acá. He invitado a todos/as mis amigos/as a que se vengan pero sé que el viaje es caro y que por ahora las cosas no están sencillas. Aquí me mantengo con la gente que tantas veces os he comentado y con las que poco a poco sigo aumentando mi relación: en la escuela con Tomás, con Milagros, me llevo bien con algunos compañeros, con los profesores, y ahora con Vicky, una chica guapa y elegante con la que Tom y yo mantenemos buena relación. Nos vemos muy poco cada semana pero lo poco que estamos juntos en la escuela lo pasamos bien. Con el ritmo de vida que llevo, y teniendo en cuenta que esto es una gran capital y todo el mundo vive a mil es difícil hacer planes de semana, de quedar un martes por ejemplo, así que no suelo tener mucho tiempo para hacer vida social, además esto no es igual con 18 años que con 28.
En el hostel me han puesto un compañero de cuarto durante dos semanas. Un chico peruano que estudia arte, muy buen tipo. Bajito, de gafas, con pinta de buen chaval, con un acento danzarín, y al que han apaleado dos veces en cuatro meses además de echarlo de su anterior hostel,... y eso que no hace nada!! Yo me llevo muy bien con él. La verdad es que me cae genial. Muy buen chico. Con los demás del hostel bien, como siempre. No estoy prácticamente nada, pero nos vemos todos los días, porque la casa no es muy grande, y somos muchos. Hay mucha gente que sólo está unos días, y muchos que llevan mucho tiempo y apenas están en el hostel para dormir, así que quedamos sólo unos pocos que hagamos algo de "vida en común". Con todo, he de decir que son muy buena gente, y que me encuentro cómodo aquí. Es cierto que podría mejorar mucho mis condiciones de vida en un apartamento, pero no es menos cierto, que resulta un lío de papeles para mí, y un gasto que no puedo ni quiero afrontar ahora mismo.
La Feria del Libro.
Desde pequeño adquirí la costumbre de ir año tras año a la feria del libro. Mi madre me llevaba. Vivíamos en la Alameda de Vigo, Plaza de Compostela para los/las desubicados/as, y como sabréis los vigueses y viguesas, allí se dispone cada año esta feria. Yo tiraba de mi madre para que completase mi colección de comics de Lucky Lucke (de la que apenas tengo cuatro o cinco ejemplares), y ella como de costumbre, trataba de conseguir (e imponía) que variase año tras año, y así, me iba comprando un comic y un libro que luego me leía antes de irme a dormir. A mí no me gustaba leer... a mí me gustaba que me leyese ella.
La FLIA (Feria del Libro Independiente y Artístico), se celebró hace poco en Quilmes, pero nada tiene que ver con una feria oficial y gubernamental como la que todos/as os podéis estar imaginando. Es hippie. Todo lo hippie que se puede llegar a ser. Cada persona va con sus cosas -no todo son libros, cuadernos, o revistas- y los dispone como puede sobre una tela, unas maderas a modo de mesa, o incluso los más experimentados y curtidos en este tipo de historias, llegan a conseguir armar una caseta con apenas medios, lo que resulta de lo más curioso. Hubo quien llevaba manualidades, quien vendía productos artesanales, quien se centró en la literatura, quien apostó por la ropa, y algunos que mostraron sus dotes con la cocina. La calle no estaba asfaltada y era una polvorienta mezcla entre camino pseudo abandonado y lugar de nadie enclavado entre los muros de ladrillo de dos casas, o dos fincas, o vete tú a saber qué. Al fondo se disponía una plataforma circulas de cemento, no muy elevada, pero lo suficiente como para ejercer de escenario, y la verdad es que quedaba genial. Allí tuve la oportunidad de cantar, con un sol justiciero cayendo sobre mí a eso de las 15h. La sensación desde allí, viendo la calle de frente, los puestos a los lados, la gente apilándose para escuchar, mientras buscaban algo de sombra, se llevaban algo a la boca, o echaban un vistazo a los puestos, me hizo pensar cual era mi verdadera labor y que ojalá siempre me acompañe; la de comunicar, la de entretener, la de contar historias, reales o inventadas, y compartirlas con los demás, y con algo de suerte emocionar a quienes me escuchen o al menos hacerles pensar o recordar algo. Fue bonito, y lo fue aún más cuando compartí escenario con Pali Muñoz, un músico prodigioso del que ya os he hablado anteriormente y que por lo visto se está acercando cada día más en sus canciones a la música de autor que tanto me ha gustado siempre, ya que antes hacía junto con su grupo, versiones de grupos de rock. En la feria estuve con Patri Angulo y Ayelén Angulo, que dispusieron un puesto de información sobre el "Club Atlético Poetas" que organizan los primeros domingos de cada mes en el Rie Bar Cultural de Bernal, y al que he asistido varias veces desde que estoy aquí.
Estuve un par de días resfriado por los cambios de temperatura... normalmente bastante calor al mediodía, pero refresca por la noche y además suele hacer viento en esta ciudad, algo que me gusta, pero que me pilla a veces desprevenido, salir y entrar de sitios con aire acondicionado, y sitios que no, en los que te asas,... lo de siempre. Lo pasé mal cuando se acercó el cumpleaños de los Rives (la familia de Patri Angulo, Dani Rives, Ayelén, Flor, Martín,... que me tratan como a uno más del séquito).
[continuará mañana...]
3 comentarios:
¡¡¡Chanflie!!!¡¡Recórcholis!!! Justo ahí tenías que terminar de postear ajjasja1!!!
No, precioso todo, me encanta leerte, es como seguir una peli ;)
pssss, Samuel......-------------------------------------------------------seguime------------------------?¿?¿¿?¿?¿?¿-------------------> ¡¡¡El apellido de Aye, es Rives!!!!!!
Ahhh y ayer Dani subió fotos del día de la FLIA, casi todas lindas, fijate por ahí podés subir alguna!
Besos.
Es cierto!! Me dejé llevar!! Subsanaré el error.
Me alegra... tú espera que ya llega la tercera parte que es dónde se explica el título... dejé lo mejor para el final. Es un desenlace lleno de explosiones, humo, y escapadas. Se está poniendo bueno. Lo cierto es que va a ser difícil mantener el ritmo para el sexto capítulo. Lo gracioso es que los Rives vuelven a tener protagonismo.
Cómo te lo montas, macho¡¡¡ ahí con mi primo Xoel, dale recuerdos de los López de Cuenca, jejeje
Un abrazo.
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