Sobre Bob Dylan.
Uno de los mejores autores de canciones del siglo XX, sino el mejor, aterriza en Vigo, en la que puede ser la primera y la única oportunidad de verlo. Es un momento histórico para muchos de los que allí estaremos, una cita ineludible, y una ocasión de disfrutar con uno de los genios de la música que permanecerá presente en el recuerdo de futuras sociedades por los siglos de los siglos, amén. Mi chica lo adora y verá cumplido un sueño al verle. Mi madre se emocionará al sentir que ha podido vivir un concierto de Dylan, del que tanto ha oído, leído, visto,... y yo tendré la ocasión para sentir esas ganas de subirme a un escenario, hacer canciones, disfrutar con la música,... lo que me sorprende, es que hasta hace una semana no se hubiesen vendido más de 4000 entradas de las diez mil que están a la venta. Lo normal es que Bob Dylan agotase las entradas, tuviese que actuar tres días seguidos y colapsase periódicos, radios, y la tele local con sus canciones y con su vida, que da para eso y mucho más. Por el contrario, nos encontramos en una ciudad paupérrima en lo cultural, que no aprecia porque no sabe, porque apenas se da cuenta de que ya ha empezado el Imaxina Sons (festival internacional de jazz que de celebrarse en cualquier otro sitio convertiría la ciudad en punto de referencia de turismo cultural) y no saben valorarlo, y porque se les trae a un artista que ocupa un lugar privilegiado entre los genios del siglo XX, que optó al Nobel por sus letras (único músico en la historia que ha logrado aspirar al premio).
Pero aunque lo de Vigo clama al cielo, Coruña no le va a la zaga, ya que allí ni siquiera actuará el genio americano porque según informan desde el ayuntamiento;
1.- No tiene demasiado tirón popular, ya que no está de "moda" o algo así. Claro, no sale en un concurso chungo de la tele, ni vende yogures, ni aparece en la Quore diciendo que le gusta la postura del perrito.
2.- El espectáculo que ofrece sobre el escenario, carece de atractivo ¿Qué atractivo puede tener un señor cantando canciones con una guitarra?
3.- Sale caro. Obviamente Bob Dylan no cobra como yo, aunque ya nos parecemos en algo... no nos contratan a ninguno.
En definitiva, me da pena el ambiente, por eso a veces me empeño en querer cambiarlo, pero nada, no hay manera.
Todos los padres con dos dedos de frente deberían llevar a sus hijos a ver a Dylan; eso es educar a un hijo.
Sobre Miguel Castro,
Si no tienen el dinero; aunque seguramente aparezca el lunes para ir a comprar a Zara una mierda de camiseta hecha por niños filipinos que tampoco saben quien es Dylan porque curran 16 horas por menos de un euro; siempre pueden ir el sábado al concierto de mi amigo Miguel de Castro que ofrecerá un recital en el Café Uf!.
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