BATMAN
Dos décadas, dos sagas.
No sé si a vosotros os sucederá lo mismo. Me cuesta mucho asociar momentos de la infancia con años concretos. A partir de los diez años la tengo mucho más clara, pero de antes, me cuesta más distinguir con qué edad pasó según qué cosa, en cambio, los recuerdos que guardo, esas imágenes mentales las tengo muy claras, las veo nítidas en mi mente, como si hubiesen ocurrido ayer mismo. Una de las primeras, y de las que mejor recuerdo, está asociada al cine.
Yo tenía siete años. Mi madre, a la que siempre le ha gustado el País Vasco, donde además vivió un tiempo, me llevó a San Sebastián. Aquella no sería la primera vez ni la última que visitaría la ciudad donostiarra, a la que le he cogido mucho apego con el paso de los años, y de dónde precisamente es la persona que ha ejercido de representante artístico mío en los últimos años; Manuel González, de la plataforma Xpression K!. El Festival de Cine que se celebra allí todos los años reúne una gran cantidad de estrellas del celuloide, y en él se presentan grandes estrenos. Aquel año, se presentaba "Batman". La primera película de una saga que comenzó de forma espectacular. Bueno, no exactamente.
En realidad, la primera película que hubo sobre el personaje de Batman data de 1966, y supuso la prolongación en el cine, de una archiconocida serie televisiva de la década de los sesenta, que presentaba al héroe enmascarado con una capa azul, y un traje gris, a su inseparable compañero de fatigas, Robin, y a un viejo Alfred, que de algún modo les conectaba con el mundo real. Aquella colorista serie, evitaba todo signo de violencia realizando un guiño al mundo del cómic, con onomatopeyas de marcado estilo "pop-art" con pantallazos de color donde podía leerse; "plaff", "punch", "crash", "pum", y un largo etcétera que ni recuerdo ni viene al caso. Aquella serie, apta para casi todos los públicos, era bastante alegre y vistosa. Todo cambiaría años más tarde.
"Batman" se estrenó en 1989, aprovechando que se cumplían 50 años de la creación del comic y del personaje, obra de Bon Kane y del escritor Bill Finger. Yo no tenía ni idea de lo que estaba aconteciendo, sé que recuerdo una alfombra roja, muchas luces, que era tarde, y que me gustaba la chica rubia. Aquella chica rubia despertó mi sexualidad años más tarde, en la eclosión de la adolescencia, cuando la descubrí en "9 semanas y media". Kim Basinger. ¡Qué recuerdos! Ahora salen chicas sexys por todos lados, aparecen imágenes en todas las esquinas, la publicidad está cargada de erotismo, casi diría que se hace excesivo, con una sobre exposición del morbo y de lo físico, pero de aquella, y para un niño, todo era muy distinto. Tim Burton dirigía con maestría el encargo de llevar "Batman" a la gran pantalla. Una oportunidad que le llegó gracias al éxito que había cosechado con "¡Beetlejuice!" sólo un año antes. Michael Keaton, la ya mencionada Kim Basinger, y un inolvidable Jack Nicholson en el papel del Joker, la némesis del hombre murciélago, protagonizaban esta primera parte de la que luego sería toda una saga, decadente saga, por cierto. La escena final de la película, fue algo que me quedó marcado. Recuerdo que me resultó fascinante. Ese recuerdo de infancia no se borra, de ahí que comprobar que veinte años más tarde, han ido apareciendo hasta 7 películas sobre lo mismo, con directores, actores, y productores diferentes, me deja un regusto amargo y me hace pensar que ha priorizado siempre el negocio por delante de la historia, y por otra parte una falta de ideas y de originalidad imponentes.
Años más tarde llegaría "Batman Returns". Transcurría el año 92. De nuevo Tim Burton tomaba las riendas de la dirección, empeñado en darle una estética oscura y tenebrosa al personaje, a él se le imputa el hecho de haber cambiado el traje del superhéroe de color, pasando del azul-grisáceo al negro que ahora todos reconocemos. Michael Keaton volvía a interpretar a Batman, que en esta ocasión se enfrentaba a dos personajes clásicos del cómic; El Pingüino, y Catwoman, interpretados por Danny Devito y Michelle Pfeiffer. La película volvió a conquistar una buena recaudación pero no tuvo la fuerza de la primera. Burton no estaba muy convencido de seguir con la saga y priorizó su gusto estético sobre la historia, y sobre la leyenda del personaje, algo que le fue muy criticado por los seguidores del comic.
Y entonces pasó lo que no debería suceder nunca cuando uno quiere mantener la autenticidad de una obra. Hay ciertos valores que no deben regalarse, y esto de pasar por encima de todo con tal de vender un producto tiene sus consecuencias. Decidieron sacar una nueva película, titulada "Batman Forever", y que sorprendentemente volvió a recaudar muchísimo dinero. El director pasó a ser Joel Schumacher, y Batman fue protagonizado por Val Kilmer, ante la negativa de Michael Keaton de seguir en la piel de la leyenda de Gotham al estar en desacuerdo con el guión. Los villanos serían en esta ocasión Enigma y Dos Caras, que serían interpretados por Jim Carrey y Tommy Lee Jones. Me acuerdo que esta película me pareció una caricatura de las anteriores, una goma. La manera de tirar por tierra un buen trabajo. Con todo, el tirón de "Batman" seguía siendo prolongado y el público seguía copando las salas de cine. Fue entonces cuando se superaron así mismos y probaron el más difícil todavía; sacar una 4ª película.
"Batman y Robin" se convirtió en uno de los mayores esperpentos de los años noventa. Mala no, malísima. Tiene el mérito de haber puesto de acuerdo a sus protagonistas a la hora de reconocer alguno de ellos que se arrepienten de haber colaborado en algo así, de destrozar la historia de un clásico. Cambió de nuevo el actor que encarnaba al héroe ¿Cómo es posible que la gente trague con algo así? Sé que algunos me dirán que en James Bond ha ocurrido ¿Y no es lamentable? A mí me parece una falta de rigor imperdonable, por eso no veo esas películas, pero bueno, allá cada uno. Ahora, Batman era interpretado por George Clooney ¡Terrible! El actor, en entrevistas posteriores ha pedido perdón a los fans de Batman por haberse cargado el mito. Chris O'Donnell interpretaba a Robin y lo cierto es que aún teniendo una buena oportunidad con un buen personaje, fue un chasco y un auténtico desastre, que él mismo reconocería años más tarde, pidiendo también disculpas. Parecido a lo que hizo Alicia Silverstone como Batgirl. Para que nos hagamos una idea, sólo repitieron en las cuatro películas dos actores: Pat Hingle (en el papel del comisionado Gordon) y Michael Gough (como el mayordomo Alfred). ¿Os imagináis "Harry Potter" o "El señor de los anillos" con actores distintos para los mismos papeles en cada película, direcciones diferentes, cambios en la historia, etc.? Terrible. Los tiranos eran ahora Hiedra Venenosa (Uma Thurman en uno de sus peores papeles) y Mr. Freeze (nada más y nada menos que Arnold Schawarzenegger). Este fue el fin de una saga con más sombras que luces. Que empezó de forma sobresaliente, continuó decentemente, y no supo parar, siguió hasta el estrépito total y la vergüenza absoluta por unos trabajos muy malos, a pesar de contar con grandes presupuestos.
Humildemente jamás me imaginaría que la historia volvería a rehacerse nuevamente. En pocas palabras; no da. O eso pensaba. Pero la industria cinematográfica, como la discográfica, o casi cualquier otra encargada del mundo de la cultura y el arte, está viciada, manipulada y apartada de sus valores originales y naturales, y centrada únicamente en cifras y contabilización de monedas, arte no, artificio. Entrados en la primera década del siglo XXI, aparece en liza el director Christopher Nolan, encargado de renovar la saga de Batman, desde un prisma diferente, más centrado en la psicología del personaje, y bla, bla, bla... Lo único que aprecio en todo este circo, es que al menos esta vez el proyecto era serio, bien planificado y orquestado y pudiendo aplicar las mejorías pertinentes habiendo tenido la posibilidad de saber qué gustaba y qué no de la saga predecesora.
De esa forma, Batman será esta vez encarnado por Christian Bale, Ra's Al Ghul protagonizado por el genial Liam Neeson, el mayordomo Alfred por Michael Caine, Jim Gordon por Gary Oldman, y Lucius Fox por Morgan Freeman. Con este plantel se firman tres películas más: "Batman Begins" (2005), "The Dark Night" (2008), "The Dark Night Rises" (2012). Una vez más, la primera película de la saga recaudó muchísimo dinero y fue un éxito de taquilla. Esto me hace pensar que si sacan otra versión en un par de años la gente seguirá yendo, pase lo que pase... Curioso.
No se le habían acabado los villanos, así que innovó introduciendo dos que nunca antes habían aparecido y alejándose de repetir la historia tal cual nos la habían contado. Por un lado se enfrentaba a El Espantapájaros, y por otro a Ra's Al Ghul. Se respetó más la esencia del comic, y la espectacularidad vino en este caso por efectos especiales y grandilocuencia a la hora de rodar las escenas de acción, dejando de lado todo el aporte estético que en su día hizo el icónico Tim Burton.
La segunda película está considerada por muchos la mejor adaptación del mundo del comic al cine. No puedo decir nada porque no la vi. Sé que fue el mayor éxito en taquilla de toda la saga y que ese año batió todos los récords de audiencia. Heath Ledger, interpretó -ahora sí- a Jocker. El actor murió poco después de hacer la película, es más, fue la última que filmó completa, cuando sólo tenía 28 años por una sobredosis de fármacos. Tanta fue la repercusión que tuvo, que fue el segundo actor en la historia en recibir un Premio Oscar a título póstumo. En esta cinta aparece otro personaje clásico del comic; "Dos caras", que es interpretado por Aaron Eckhart.
Y llegamos entonces a la última película, la que de algún modo cierra el círculo ¿O no? Bajo el título en España de "El caballero oscuro: La leyenda renace", y que he visto recientemente. Voy a aprovechar pues para comentarla de forma específica en un artículo aparte de este, que ha servido de repaso a veinte años de películas de Batman. ¡¡Una película cada tres años!!
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