El Corte Inglés me ha brindado la posibilidad de presentar el disco en sus centros de Santiago de Compostela, Vigo, y Coruña durante el mes de diciembre. Estoy muy agradecido porque es una actividad que venía persiguiendo desde mi primer disco. Por aquel entonces mi distribuidora me prometió que se conseguiría hacer, pero... nunca se hizo. Ahora lo he logrado yo por mí mismo, trabajando y colaborando con ellos y ha funcionado. Creo que la música debe estar por todas partes, llenarlo todo, y en cierto modo siempre es así, lo diferente de la propuesta en la que me involucro es en llevar la música en directo a cualquier sitio, siempre y cuando las condiciones de sonido no comprometan seriamente la calidad de lo que se está haciendo. Así que hemos estado (Miguel Castro me acompañó en Santiago y Coruña a la guitarra y en los coros) mostrando las canciones a todas las personas que por casualidad se encontraban en las instalaciones de El Corte Inglés.
De forma excepcional (y debo agradecerlo con énfasis) se venderán mis discos en estos centros hasta después de la noche de reyes. Una oportunidad para que quienes lo deseen adquieran el álbum en una tienda, como se hacía antaño con asiduidad, aunque hoy por hoy resulte poco habitual debido a la crisis de la industria fonográfica.
Uno se siente orgulloso -e intimidado-, cuando ve su imagen en la sección de discos del Corte Inglés en grande, y lo único que piensa es en demostrar que merece un sitio, por pequeño que sea, entre tanta buena música.
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