Samuel Levi.
Concierto en el Café Auriense. (Ourense)
17 de abril de 2009
Sobre el concierto que hice ayer en el Auriense.
Cayó una bestial tromba de agua en cuanto llegué, de esas que tumban el ánimo a cualquiera, de esas que enseguida me recuerdan que visitar si, quedarme a vivir no, de las que ayudan a incrementar la fama del penoso tiempo que tenemos en galicia por el resto de españa. Pues el tiempo fue un testigo más del delicioso concierto de anoche. Salí en primera, como está mandado, pero paso a paso, con sigilo, como para no molestar a los dormidos. Fue un concierto muy satisfactorio. La gente mostró bastante respeto, escuchó con atención, y me animó a permanecer en el escenario dos horas. Me están malacostumbrando a lo de las dos horas, y mi garganta se queda a veces un poco atrás, como cuando tu novia te pide el segundo después de darlo todo en el primero y ves que no llegas, pero quieres satisfacer, porque quieres demostrar que vales, que lo vas a dar todo, que tu entrega es total, que el placer de tocar es inmenso. Quería que las canciones sonasen como cuando las preparo en casa, como esas veces que estás en el baño, porque hay una acústica soberbia, y el tema suena a disco, y dices, ahora sí, así es como es esta canción. Luego, si eres capaz de que en el escenario suene igual es la gloria, para ello deben alinearse las estrellas y tener una escalera de color por lo menos en la manga, además de varios amigos/familiares entre el público que arengen. Yo no tenía favoritismos, pero salió. Disfrutamos todos y eramos bastantes. Muchos quisieron más y ya son gente "turno de noche". Espero que el disco les guste también. Repetiremos en ourense porque fue una visita muy agradable y repetiremos en el auriense porque fueron unos geniales anfitriones, preocupados en que nunca deje de sonar la música, pero la música de verdad, la que se toca con las manos, con el instrumento, y con la voz, no la enlatada y prefabricada. Comida de casa no fast food.
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